domingo, 19 de octubre de 2008

The Little Things III

¿Tengo Un Don?

El tiempo pasa y Oriel seguía analizando cada detalle de su vida minuciosamente a tal punto de que un día se dio cuenta de una situación un tanto espeluznante.
Atando cabos sueltos de por aquí y por allá concluyó que su nivel de intuiciones correctas era alto, pues, cada vez que le decía a sus compañeras/os de la universidad que algo en sus vidas creía que pasaría, pasaba. Por otro lado, con su familia también estaba pasando, y para agrandar más el asunto, decía cosas sobre sí mismo que se estaban cumpliendo.
Algunos dirán que se llama sugestión, no creo que sea el caso.

No obstante, las cosas que predecía con respecto a él no le hacían mucha gracia, ya que la que más le importa era súper destructora, la más negativa de todas y le mataba todas las esperanzas existentes.

Siento que con eso cavo más mi tumba, sigo haciendo un agujero en donde no debería. Si fuera todo tan fácil de llevar, otra primavera pintaría, con ese Sol envolvente que todas las mañanas me levantaría con alegría y con ganas de relucir como nunca.

Lástima que aún eso no sucedía totalmente; no podía negar que a veces sucedían cosas que le llenaban de gozo, sí, pero a veces, entonces pensaba que no existe la gracia al estar tratando de llevar algo que lo tiraba hacia atrás por más que quisiera cargar con ello sin temor a quedarse con ideas sueltas, con intenciones que le superaban y no las lograba llevar a cabo.

¿Sería que la vida solamente quería enseñarle a porrazos?

martes, 7 de octubre de 2008

The Little Things II

Desarreglo

Hoy es tu cumpleaños, pero no estás.
Hoy me gustaría abrazarte y desearte lo mejor, pero no estás.
Se supone que desapareciste, es cierto, ya no estás.
Se supone que ya no debería llorar, pero en estas gotas aún vives.
Todo esto es una mezcla mal batida que se está comenzando a desarmar, pero ¿qué se espera que haga aquí, ahora, así como estoy?
Es raro, pensando que hace un mes ya que todo culminó, sin embargo, aún tu imagen se resiste a partir, todavía no te puedo dejar ir. ¿Qué hago contigo, enano?

Oriel no sabe que paso ni tampoco sabe qué hacer.
Sólo quiere decirle: Feliz Cumpleaños, Antonio...

I've kissed your lips and held your head.
Shared your dreams and shared your bed.
I know you well, I know your smell.
I've been addicted to you.

Goodbye my lover.
Goodbye my friend.
You have been the one.
You have been the one for me.